"Comida muy rica en el menú, con platos elaborados de forma exquisita. Personal muy atento. Paré solo a tomar un café y cuando vi el movimiento de gente decidí quedarme a comer. Pedí un ravioli (si, solo uno pero enorme y tierno) de champiñones con salsa de trufa. Simplemente impresionante. De segundo un filete a la plancha que fue lo peor de todo (un filete a la plancha no da mucho juego) y luego NO PERDERSE la tarta de queso. Una de las mejores que he comido, suave, jugosa... Sin duda cuando vuelva por la zona será parada obligada. Se merece las 5 estrellas"
