"No he comido en el restaurante, pero he merendado unas cuantas veces. Buen queso, buenos fritos, rica cuajada y, para mi, excepcional goxua. Ahora, por culpa del dichoso bicho, el comedor está cerrado, pero han abierto una terraza simplemente maravillosa, con orientación suroeste, vistas a un prado con árboles y ovejas y protegida del viento, donde se está genial y que es accesible en silla de ruedas. ¡Ah! Y la goxua sigue siendo una de las mejores que he probado, espectacular."