"El peor chino de mi vida. He tenido la desgracia de pedir comida china de este restaurante por Glovo y el resumen es que sólo ha valido la pena los productos que ya vienen preparados, como las galletas de la suerte y el pan de gambas. De lo demás, nos han servido: Tallarines fritos de dos tipos, pero ambos insulsos y, en el caso de las gambas, mal cocinadas así como la ternera que estaba como blanca. Zanahoria cruda, no medio cocinada, cruda en en los platos calientes. Ensalada china sin algas pero, ¿con pollo? Wan Tun enormes, de unos 15cm, con la masa cruda y una pieza de carne (jamón cocido? de menos de 1cm. Los gyozas de pollo , de una pasta blanca uniforme, sabían únicamente a col. 30€ de un pedido de Glovo de los que prácticamente lo equivalente 20€ ha acabado en la basura."