"la terraza es muy agradable, aunque carece de un poco de iluminación. un personal muy amable, que conoce el menú y nos aconsejó bien. Pedimos 3 platos para dos personas. como una entrada tomamos cremas de mezze, es una degustación de hummo de garbanzos, mutabal o crema de berenjena servido con granada, muhammara o crema de pimienta con nueces y labneh o ácido yogur con membrillo. todos los sabores y texturas sorprendentes, excepto el hummo que tenía poco gusto. Lo acompañan con pan de pita. el siguiente plato fue escurridizo y gordo, 3 empnadillas con diferentes rellenos acompañados con mermelada de tomate. son fáciles de compartir entre dos porque dos unidades de cada tipo vienen: carne de res con pimientos, carne con canela y espinacas con queso feta. la masa estaba deshecha y era bastante gruesa. Por último, pedimos brotes solo de becerro (2 unidades). bien probado, aunque la carta hecha de más. se sirve con la crema de berenjena, otro yogur y tomates de cereza, pimienta de campana y cepillo a la parrilla. En general, la cena fue muy buena. el restaurante ha diseñado el menú muy bien para un público con poco conocimiento de la cocina libanesa, de modo que en un plato hay diferentes sabores y por lo que no se cansan. el interior del restaurante tiene mala extracción de olores. Es recomendable reservar en la terraza en el momento de más afluencia de personas. el precio es muy bueno, por 23 euros por persona comimos dos y nos fuimos bastante llenos."
