Bodega "el Potro" - Menu

Un lugar de los de toda la vida. Muy acogedor, con comida casera y buena atención. Ambientado en el mundo del campo y el toro.

Comida maravillosa. La pluma era mantequilla. El precio magnífico y el trato inmejorable. José, el camarero, un amor de persona

La comida exquisita y el trato inmejorable. Platos deliciosos.Te atienden rápido y bien. El lugar tranquilo y con buen ambiente.

Sólo he comido dos veces, pero todo rico y buen ambiente. El sitio es hermoso, típico sitio andaluz con un gran patio con sombra y sol. No es barato, pero es calidad

Aunque nos a tardado muchisimo la comida, (creemos que problemas en cocina), los camareros han estado muy atentos y estaba todo de primera. Volveremos (aunque tengamos que esperar);

Lugar doloroso, tipo de decoración granja relacionada con el mundo del caballo, por lo tanto el nombre. Estábamos muy cómodos, hacia el buen tiempo y disfrutamos de su terraza. Buena comida y servicio también.

Buen servicio y ambiente. La comida muy buena y abundante. 6 personas con 4 entrantes, 6 platos principales, surtido de postre, botella de vino, agua, un refresco, 8 cervezas,pan y picos 215€. Tocino de cielo, pluma, croquetas, arroz, presa, codillo, brocheta... Todo muy rico, recomendado

Venimos al Aljarafe siempre en verano y Navidad, y estás navidades hemos hecho un gran descubrimiento con está acogedora bodega. Platos abundantes, muy buen servicio y buena calidad en la comida. La presa estaba muy buena, los platos combinados son bastante abundantes y el arroz de carrillada que pidió mi pareja estaba muy rico y era también una porción generosa. Cervezas frías y bien tiradas. No es barato, pero yo diría que la relación calidad/ cantidad/ precio es más que justa Media de croquetas, una ración de ensaladilla, plato combinado de presa y arroz de carrillada, con 6 cervezas y cafés no pasó de 80 euros.

He sido cliente de este restaurante por un tiempo, porque no lo sabía, pero desde la primera vez que estaba allí me encantó y no he dejado de ir, lo recomiendo por todo, por la calidad de la comida, por sus decoraciones, sus estancias y por la buena atención del personal y para llenar la bondad y la actitud del propietario, Sr. José León, le llamé el último día que estaba allí porque había perdido su billetera Un diez como persona y como buen restaurador. Les agradezco que todavía haya personas de este carácter moral que con su actitud demuestren la educación que hoy falta, tanto él como Antonio y su esposa que la dieron intacta. Siempre estaré agradecido.