Casa Rufo - Menu

Primer plato muy bueno y de segundo chuleta , género bajo para lo que pagas

Un 10! Comida muy buena y servicio excelente. Este restaurante es para probar una vez o más en nuestra vida!!

Es caro pero vale cada euro... Maravillosa experiencia y pintoresco lugar enmarcado en una antigua tienda de ultramarinos. NECESARIA visita en Bilbao. El salmón y el txuleton son de otra galaxia View menu

Atención excelente. Correctos y cercanos. El local precioso, acogedor y se respira su historia. Y la comida? Sin palabras. Los hongos con foie son de llorar. El txuletón a la brasa increíblemente cocinado y en un punto perfecto. Para volver muchas veces.

Una experiencia agradable, comida muy sabrosa pero el rabo de toro estaba un pelin salado para mi gusto. El camarero fue muy atento y educado, hasta nos invitó al postre gratis por el contratiempo del plato del estofado. En general, volveremos a repetir.

El restaurante Casa Rufo(Bilbao) es un restaurante bilbaíno.Se trata de una tienda de delicatessen que fue inaugurado hace más de 40 años y que posee varios comedores de ambiente muy agradable.Dispone de un comedor distribuido en pequeños ambientes diferentes para agasajar a clientes y visitantes que degustan platos sencillos que se incluyen en una carta con productos de calidad. View menu

Casa Rufo es un lugar con encanto que conjuga una tienda delicatessen junto a su afamado restaurante, donde toma protagonismo el buen producto base. Si bien la chuleta es un clásico en Casa Rufo , también es cierto que lo que uno no puede perderse es el espectacular salmón ahumado Keika. Una absoluta elegancia ahumada que te marcará un antes y un después en la degustación de salmón ahumado.

El restaurante tiene una decoración con el aspecto de una tienda de ultramarinos antigua muy bonita y sirven en la carta varios platos de conservas que ellos elaboran. Pedimos croquetas caseras y Magret de pato para compartir y de principal un chuletón con patatas fritas. El Magret estaba delicioso y el chuletón no se quedaba atrás. De postre pedimos una torrija y una tarta de queso manchego con helado de queso Idiazabal que tenían un sabor muy intenso.

Es un local muy original, una mezcla de tienda de ultramarinos y restaurante. No sabes bien dónde empieza una y dónde termina la otra. Tiene pocas mesas. En cuanto a la carta no es muy larga, y los platos no son muy elaborados, ya que lo que prima es la calidad. Pedimos unos entrantes para compartir… buenísimas anchoas y bonito y como plato principal un chuletón, especialidad de la casa y una merluza rebozada, todo estupendo. Los postres también buenísimos. En cuanto al precio, no es para ir a diario, pero merece la pena una visita tanto por la calidad de la comida como por la originalidad del Local. View menu